Renovación de los Votos Temporales de Esther Sanz FI en Salamanca

El viernes 24 de junio celebramos la renovación de mis votos temporales como Hija de Jesús en la comunidad de Montellano de Salamanca. Fue una celebración sencilla, cercana y me sentí acompañada por las hermanas que, aún sin estar allí, sabía que lo estaban a través de la oración. Unas semanas antes nos preparamos  con un día de retiro en el que pudimos participar toda la comunidad.

La Eucaristía, que este año coincidió con la celebración de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús,  fue presidida por P. Ricardo de Luis, op. (Richard),  gran amigo de las Hijas de Jesús y al que tenemos que agradecer siempre su gran disponibilidad y cercanía fraterna. Nos acompañó también Rosa Nieto, directora del Colegio Mayor y mi tío Fernando, que al vivir en Salamanca pudo estar también presente.

Como suele pasar en estos momentos, no es fácil explicar lo vivido. Aunque, por otra parte, tal vez sea normal porque las palabras no terminan de transmitir bien lo de dentro. Sí puedo decir que, a pesar de los nervios previos, que van conmigo siempre, hubo un momento en que me inundó la calma al pensar en las hermanas de la comunidad, y en todas las demás, las que sin estar presentes, sabía que lo estarían por la unión de los ánimos, el cariño y la vocación compartida.

Me sentí pequeña y parte de algo grande, cálido, real y firme. Recordé que la renovación de votos trata de su amor y su llamada, y no tanto de mi fidelidad… y pedí poder vivir el momento desde Dios y no desde mí. Me conmovió tomar conciencia del amor y la confianza incondicional que Él “vuelca” en cada vocación, también en la mía.

A veces creo que se nos olvida la suerte que tenemos las Hijas de Jesús…  Personalmente, hoy solo me sale hacer silencio y sonreír desde dentro, agradeciendo su llamada y toda la vida que me ha regalado a través de ella.

Esther Sanz FI