Los 22 colegios dependientes de la Fundación Educativa Jesuitinas vuelven a abrir sus puertas en “un contexto inédito e incierto”. “Están siendo momentos complejos de cara a la organización, las medidas higiénico-sanitarias y los recursos que las distintas administraciones están dando a los centros para afrontar esta realidad”, reconoce la presidenta del Patronato de la Fundación, Rosa Romo FI en una carta destinada a las Hijas de Jesús y otras comunidades religiosas.
En este contexto, la presidenta del Patronato llama a afrontar el reto con “paciencia, flexibilidad y colaboración de todos en la comunidad educativa”. Y se hace eco de las palabras del Papa, quien declaró el 23 de marzo a raíz del confinamiento mundial que “los pueblos van a sacar de esta crisis enseñanzas para repensar sus vidas”.
Uno de los centros que tendrá que armarse de paciencia para acometer el inicio de curso es el Colegio Santa María de Murcia, dependiente en su origen de las Hijas de Jesús y recién incorporado a la Fundación Educativa Jesuitinas el 1 de septiembre. Gestionado por la Fundación Escuela Católica durante los últimos años, según Rosa Romo “la comunidad educativa del colegio está viviendo estos momentos con ilusión y alegría de pertenecer a nuestra red”.
Este colegio y los otros 21 que forman parte de la Fundación vivirán durante este curso un lema que orientará toda su acción: Crea. “Estamos tratando de llevar todo esto a nuestras planificaciones pedagógicas, tutoriales y evangelizadoras porque crear es la llamada a colaborar en la acción creadora de Dios”, revela Rosa Romo.
Así lo cree Beatriz Neff, compositora junto al cantante David de Amo del himno que acompaña a este lema. “Todos somos creadores. Si te lo crees y, sobretodo, si crees en los demás, se genera vida y algo nuevo con ellos”. Para esta hija de Jesús, la composición del himno ha supuesto “un proceso creativo en el que David y yo nos hemos ido dando tiempo y dejando que la canción misma surgiera”. “Hemos sido cauce de esa vida que había dentro de la propia canción”, añade.
Por su parte, Rosa Romo insiste en que “en este momento histórico de aparente deterioro, ruptura de estructuras, relaciones a distancia, bienestares deformados y vulnerabilidad evidente, este lema cobra una relevancia especial”. Y subraya que la máxima “nos invita a no conformarnos, reaccionar y situarnos con confianza y esperanza ante el futuro, pues lo nuevo está por nacer”.
Por último, las diferentes comunidades educativas dependientes de la Fundación Educativa Jesuitinas seguirán durante todo el año la llamada a la acción apostólica que en su momento les hizo la Congregación General XVIII de las Hijas de Jesús, a saber: “Proteger la casa común y vivir la ecología integral“.