“Vuelvo esperanzado en una juventud comprometida con el otro. En una Iglesia comprometida con sus jóvenes”
El pasado fin de semana, 22 y 23 de marzo, un grupo de Jóvenes FI participó en una nueva edición de la Escuela de Pastoral con Jóvenes (EPcJ), que este año llevó por lema “Mi esperanza eres tú”.
Bajo esta temática, se reflexionó sobre la esperanza a partir de la invitación del Señor a su banquete, donde todos tienen cabida: “El éxito del banquete consiste en ser muchos –y apretados–, disfrutando juntos de la buena comida y de la alegría que surge cuando se está en buena compañía”. Como en ese banquete, todos necesitamos esperanza y estamos llamados a llevarla a los demás. A través de diversas dinámicas, testimonios y la ponencia de Álvaro Lobo sj, los participantes profundizaron en la importancia de ser signos vivos de esa esperanza y transmitirla con una alegría auténtica.
Testimonios de la experiencia
Para comprender mejor el impacto de la EPcJ, compartimos el testimonio de José Antonio García, joven que formó parte del equipo organizador y participó en esta edición:
“Ser parte del equipo me ha permitido descubrir otros movimientos dentro de la Iglesia, su trabajo en sinodalidad y cómo transmiten la fe a los más jóvenes. Tras meses de trabajo online, tuvimos un encuentro presencial muy chulo, que nos ayudó a conocernos más allá de una pantalla. Creamos vínculos muy bonitos y preparamos juntos la mayor parte de la escuela, viviendo intensamente cada momento y teniendo muy presente al Señor.
El día de la escuela lo vivimos con mucha intensidad. En los días previos, ultimamos detalles, organizamos la decoración, coordinamos los testimonios… ¡Muchos nervios! Siempre creemos que algo fallará, pero no: todo salió genial y la alegría de los participantes lo confirmó.
Todo lo que mueve una escuela como esta es increíble, porque es solo por y para Él, para que más jóvenes se acerquen a la fe. Sin duda, invito a todos los jóvenes a vivir un fin de semana diferente y dejarse llevar por el Señor”.
Otro de los participantes, Javier Canales, joven de Sevilla que asistía por primera vez, también quiso compartir su experiencia:
“Creo que la Escuela de Pastoral con Jóvenes es un espacio que te hace mirar al otro con ojos esperanzadores. Porque puedes evidenciar cómo todos en la Iglesia luchamos diariamente por llevar el Evangelio a los más jóvenes y cómo hacerlo siendo un joven más.
Me impresionó la humildad y familiaridad que se respiraba. Aunque casi ninguno nos conocíamos, compartimos la misma misión: llevar el mensaje de esperanza a los jóvenes. Vuelvo esperanzado en una juventud, como la mía y la de otros muchos, comprometida con el otro. En una Iglesia comprometida con sus jóvenes”.
Desde nuestra congregación, damos gracias por estos espacios de formación y sinodalidad, que nos impulsan a seguir caminando juntos en la fe. Nos llevamos con alegría la invitación al Jubileo 2025, con el llamado a ser peregrinos de la esperanza.
