El año 2021 la Catedral de Burgos cumplía 800 años. Con motivo de este Octavo Centenario de nuestra catedral, el papa Francisco concedió a Burgos la celebración de un año jubilar. Había que pensar y preparar bien la celebración.
A raíz de una de las propuestas de la comisión diocesana del jubileo en unión con el Cabildo y la delegación de Liturgia surgió la idea de “Actualización del Relicario de la Capilla de las Reliquias de la Catedral de Burgos. Se trataría de incorporar al patrimonio de reliquias de esa capilla todo el santoral burgalés como memoria viva de “los mejores hijos de la Iglesia en Burgos”.
Llevar a cabo este proyecto, pensado dentro de la conmemoración del Octavo Centenario de la Catedral, ha sido costoso. Pero, por fin, en este año 2024, el 2 de febrero, día de la Vida Consagrada, nuestro arzobispo, bendijo la Cruz-Relicario. Con especial emoción era acogida la Cruz mientras la música llenaba las naves de la Catedral con el canto “Christus vincit”. Reliquias de fundadores doctores, pastores, vírgenes… que habían pisado este mismo suelo que nosotros estábamos pisando. Momento en que la Catedral, como Iglesia madre, acogía las reliquias de sus hijos e hijas para recordarnos su ejemplo y para ponernos bajo su intercesión
Se trata de una cruz de madera dorada, bruñida, y con un estofado en tonos rojos en señal de martirio y de vida entregada en el día a día, en la que están incrustadas las tecas con reliquias de santos y beatos Fundadores vinculados a la archidiócesis de Burgos. El dibujo que se descubre entre rojo y oro muestra toda una serie de hojas que nacen de un mismo tronco y que van adornando el árbol de la Cruz.
La bendición de esta Cruz-Relicario en el día de la Vida Consagrada ha supuesto una manifestación y un recordatorio de tantos "rostros de la LUZ" que han escuchado la llamada del Señor y han respondido con generosidad y audacia: "aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad". Y se nos invitaba a hacer memoria de los que han alcanzado la santidad en el fiel seguimiento de Cristo, aceptando la cruz en sus vidas… Su ejemplo es una nueva llamada para reavivar nuestro propio seguimiento.
Se nombraron a algunos de los santos y santas de quienes procedían las reliquias.
Entre ellas está santa Cándida María de Jesús.
Damos gracias a Dios porque esta Cruz-Relicario es patrimonio de la Catedral de Burgos, y en ella esta nuestra Fundadora, que por su santidad merece ser venerada.
Mª Carmen Martín, FI
