Un año más volvió a reunirse el Seminario de Ejercicios Espirituales que, de manera anual, se junta para orar, compartir textos y comentarios sobre los Ejercicios Espirituales y explorar, en tiempos nuevos, nuevos modos de abordar esta fuente de vida que son los EE.EE.
El sábado 26 de enero nos hemos reunido para compartir nuestra reflexión-oración de los artículos sobre los deseos, tema que un año antes decidimos profundizar en él.Este Encuentro siempre es rico por la sencillez y la empatía que tenemos. Somos un grupo de Hijas de Jesús y laicos interesados en profundizar en la espiritualidad ignaciana y compartir experiencias que nos ayudan a todos.
Los deseos en el libro de los EE, en la experiencia de san Ignacio y la Madre Cándida, nos ayudaron a comunicarnos poniendo en común nuestras aportaciones personales.
La dinámica del encuentro nos ayuda la escucha atenta del compartir.
Además de los artículos sobre el tema nos hemos ayudado de la película “Un don excepcional” que os recomendamos.
Agradecemos a todos la responsabilidad de la preparación del encuentro que como todos los años, comienza y termina con una oración preparada que ayuda mucho.
En la evaluación se valora y se agradece mucho este Encuentro y esperamos poderlo mantener para el próximo año con el tema propuesto de la Elección.
Flora Valdivieso FI
Nuestro encuentro anual en torno a un tema de ejercicios, nos ha permitido de nuevo confrontar nuestra vida con el trabajo realizado personalmente y compartido en nuestra reunión a lo largo del día. El tema esta vez fue él de los deseos, eje transversal de todo el proceso de ejercicios.
Pusimos en común varios artículos como: “La afectividad y los deseos en los Ejercicios Espirituales» de Adolfo Chércoles, los “Deseos» en el texto de los Ejercicios de S. Ignacio, “La ordenación de los deseos en los Ejercicios Espirituales» de Luis María García Domínguez, los deseos expresados en las cartas de Cándida María de Jesús…Todo converge hacia una profunda concienciación del itinerario de nuestra vida hecha de altibajos, con un corazón entero y dividido entre luces y sombras…
La experiencia de los Ejercicios nos lleva a una conciencia viva del yo profundo donde cohabitan nuestros apegos y nuestros grandes deseos.
Los Ejercicios son para “preparar y disponer el ánima». Cómo recalca Chércoles, “somos un puñado de deseos», pero lo importante es ”cómo están enganchados y dónde…”. No se trata de una ausencia de deseos sino de una reestructuración de mis deseos.
El compartir no solo reflexiones en torno a este tema vital, sino abrirnos a compartir experiencias, nos anima siempre a “no columpiarnos en la seguridad de una buena conciencia», sino a ver si lo que vivimos está en función de realizar el fin, optar desde “nuestra mera libertad y querer”.
Michèle Valson FI