El día 1 de febrero de 2020, nos reunimos, como todos los años, un grupo de Hijas de Jesús y de laicos para estudiar y compartir la reflexión sobre algún tema de los Ejercicios ignacianos. Nos convocan Julia Martín, Flora Valdivieso y Michèle Valson. Este año nos hemos reunido 17 personas, 10 Hijas de Jesús y 7 laicos (4 hombres y 3 mujeres) en la Sede de la Fundación Educativa Jesuitinas.
El tema ha sido “La elección en los EE.EE.”. Previamente nos habían mandado una serie de artículos sobre este contenido, cosa que hemos llevado trabajada y orada para poder compartir en el día señalado, aclarar dudas, problemas, etc.
Comenzamos haciendo una hora de oración sobre unos textos que nos entrega Julia y, a continuación, ponemos en común las gracias recibidas de Dios en este sabroso rato de silencio y quietud que todos agradecemos tras el trajín diario. Acto seguido comentamos la materia trabajada: de qué cosas se debe hacer elección mutable e inmutable, los tres tiempos para hacer sana y buena elección siguiendo el orden de las cuatro semanas que señala Ignacio, la confirmación de la elección, problemas, etc.
Con este tema tan interesante han salido a la luz fuertes interrogantes que nos plantea hoy el cambio cultural que estamos viviendo. Nos preguntábamos si hoy día hay algo inmutable en la vida, ¿qué opciones diríamos que hoy son inmutables dada nuestra realidad? ¿Está todo sometido a cambios? ¿También lo que dice la Iglesia? ¿Cómo se puede hacer un discernimiento espiritual para separarse de la mujer o el marido cuando el sacramento ha sido válido?, ¿Cómo se puede hacer un discernimiento espiritual para dejar el ministerio sacerdotal cuando el sacramento ha sido válido? ¿Cómo se puede hacer un discernimiento espiritual para decidir sobre una vida en pareja del mismo sexo?
Estas y otras cuestiones candentes que no se pueden tratar a la ligera. Creemos que por encima de lo establecido por ley está la misericordia y el acompañamiento pastoral. Estas cuestiones, no porque sean delicadas y complicadas, a veces, tenemos que esquivarlas o ignorarlas, siempre han de ser acompañadas. En determinados casos se requerirá la intervención de un especialista (abogado, psicólogo, médico, etc.) ya que superan nuestra capacidad y sólo podremos llegar hasta un determinado punto, pero sí actuar con la convicción de que todos somos hijos de Dios y Él nos ama a todos por igual. De ahí que la misericordia y la compasión ante el sufrimiento de muchas personas en los casos citados con interrogante, exijan nuestra compañía.
Por otro lado, vemos la necesidad de abrir nuestra mente y también conocer los últimos documentos de la Iglesia en todos estos temas relacionados con las preguntas ya formuladas. Aquí entra en juego el ver la vida como un proceso de maduración personal, con posibilidad de cambios, de elegir otros rumbos y opciones. Es posible que hoy consideremos equivocadas o fuera de la Iglesia algunas situaciones que, en realidad no lo sean cuando esas personas viven proyectadas a Dios, con una gran honradez y sinceridad, comprometidas con los necesitados y abiertas a lo que Dios quiere para ellas dadas sus circunstancias… Por eso, depende de cada caso la solución que hay que buscar, no es para todos igual.
En EE. la elección es algo clave. Hemos de caer en la cuenta de que, desde la libertad, la persona se va haciendo cargo de su vida con la gracia de Dios que en todos actúa. A nivel cristiano vamos creciendo de forma cíclica, no lineal ni cronológica, y esto dura hasta el final de la vida. De ahí la necesidad de dejar a un lado nuestras “seguridades”, nuestras zonas de confort, el “siempre se ha hecho así”… Esto no es más que el salir de nuestro propio amor, querer e interés que dicen los Ejercicios.
La importancia de conocer estos tiempos en la persona, nos lleva a estar en una actitud de permanente formación y con la mente abierta para acompañar a otros y también para conocernos mejor a nosotros mismos. La vida cristina es dinámica, nunca fija ni anquilosada.
Como conclusión sacamos que lo único inmutable es Dios y su amor a todos. Lo demás está sometido a cambios.
Por la tarde, en conexión con el tema, vimos una película donde el protagonista hace una elección en la que entra en juego la libertad en una situación muy difícil de lucha por la abolición de la esclavitud en la sociedad inglesa del siglo XVIII, “Amazing grace”. Después de un breve fórum, propusimos posibles temas para el próximo encuentro.
Terminamos el día haciendo una oración de acción de gracias por la riqueza compartida en un tema tan interesante como es el saber elegir bien.
Henar Martín FI